El encantandor señor basura primero se hace el amigo para ser el enemigo y vuelta a jugar sucio.
El tipo vive en el atril de su delincuencia.
Y se va a morir consumando mi muerte, no a otra cosa le ha dedicado años y tiempo que expulsarme del mundo como si fuese el dueño.
Y qué mierda mporta, no hemos ido tantos.
Y tiene un atelier donde luego de diseccionarme festeja. Pero esa misma oscuridad que me apaga la mirada enciende lo que pude entregar a otro. No todos logran odiarme por mandato. Incluso si es decreto.
Y que espada tan victoriosa he hundido en mi propio corazón después de todo, nunca pudo latir al ritmo de marchas militares. Yo oigo otra música.
Estratagema de mentiroso brillar, sacame este puñal envenenado en el último palpitar.
Chuz el asesino camina libre
Y la sangre todavía escribe.
Cuantos asesinos caminan libres y la sangre todavía escribe. Si ya está armado todo que importa quien me mintió cuando quien me dijo una verdad, quien miente y quien dice la verdad si la verdad notoriamente la ha impuesto un poder de abuso jamás soltado. Sin un solo renglón de igualdad posible, forzando todo en mi contra. Que importa pues. Quizás es verdad que se distribuye así la cuestión, dando casa al que ya tenía y al que ya vendió. Tengo que reírme de todo. Hay injusticias que contadas no pueden ser. Soy muchas cosas pero no me prostituyo dice mientras el hambre no dice, y después también te lo repito.
y el jugó sucio parece ser
No hay comentarios:
Publicar un comentario