No quiero y no me interesa

Unas pocas palabras que titulan pequeñas conquistas de dignidad.
No quiero y no me interesa que sean olvidadas personas que sufren terriblemente mientras se hace apología de la alegría de pocos, tampoco quiero y me interesa congraciarme con los que se dan la mano en las mesas de negociaciones para acceder a gobernar otra vez en nombre de mejoras que nunca hicieron cuando fueron gobierno.
No, mil veces no. Hay otra vía, cra tu propio partido hermano, creá, creá y creá porque si no existe lo que soñas no tiene sentido pedirlo a ninguna de las partes.
Quemate las pestañas, cagate de hambre, explicales a tus cumpas y camaradas que te persiguen por bastantes más complejidades que las reconocen, aceptá que tus sueños son más inmensos que tu pequeña persona sola ante poderes terribles, viví y morí por ellos pero no te vendas ni aceptes vivir esclavo. Es preferible morir a tiempo la propia vida que vivir una que sea ajena.
A mi también me hirieron y cagaron en todos los colores y formas posibles hasta desangrarme para rematareme, y vivo una situación tan pero tan de mierda que te haría estallar los sesos cambiarme de lugar un mes. Pero aún así me muero peleando. Rompiéndome en ideas en papeles para legar algo útil a quienes ya no se comen más que pueda defenderse alogo valioso sin que pelogre la propia vida, puede que confunda los mensajes como un allo ciego, pero si mi lugar fuese la cárce según ellos ¿cual es el de ellos? Pensalo, ni falta hace que me respondas, pensalo y vas a ver que tanta mentira es un monumento a la prepotencia.
Yo no puedo volver a formar filas porque hice mi propia fila hermano, así, en pelotas, como nuestros paisanos, aquí solamente hay libros y lápices, es lo que tanto temen. No hay trajes caros, ni hay comidas fastuosas. Solamente un tipo buscando un camino que no le de vergüenza andar. Por apelar a ataques ad hóminem y a pasados relatados según la óptica de la conveniencia de intereses creados vinieron a amputarme las piernas, cada cual tiene su circo y no todos su pan.
Se lo dije hace mucho a alguien, no emprendería contra compatriotas una peléa para ganarla, yo no soy un cipayo. Pero los que alambraron la causa popular y se roban los diccionarios no contienen con sus patovicas en el lugar de admisión la patria que yo amo el pueblo al cual me debo y la fe que me empecina. ¿Que si sabía que era pelear a muerte? ¿Cuando no lo es entre una hormiga y miles de equinos que corresn en fila por la avenida que debo cruzar? Puede que yo esté solo, muy solo, demasiado solo hoy, pero mañana, esa idea que es lo que en realidad viajó, no lo va a estar. Y tal vez algún día los que gozaron de abusar de poder se vean tan horrendos en el espejo como este señor de abajo.


Me enviaron un mensaje que dice Gracias y está firmado por una tal Kris. Mas allá de quien lo envía, de que sector o persona lo envíe, la idea claramente de cada parte tiene intereses precisos, negarme a que los puedan ejercer sería negarme a confrontar con gente muchísimo más poderosa que yo, ¿cómo podría negarme a tal cosa? Si encima han tenido las sitaciones de poder de extorsión y de manipulación dando por resultado un poder tan total que sería casi equivalente a tener un lector de mente y el aparataje jurídico a servicio de uno.